Esto suele generar conflictos, roces entre dos sistemas de valores muy diferentes, prioridades irrelevantes y hábitos generalmente difíciles de conciliar.
En este artículo, vamos a ver cómo podemos gestionar los problemas de conducta en los adolescentes según principios psicológicos sencillos.
Consejos para gestionar los problemas de conducta en adolescentes:
- Conocer cuál es el problema
Plantearse la pregunta de qué es lo que falla, suele dar paso a muchos errores, por lo que es importante analizar la situación.
- Detectar aspectos en la vida del adolescente en los que te necesite
Se debe observar cuáles son las prioridades del/de la joven. Cuando se sepan, tendremos que valorar en qué aspectos de su vida te necesita más. De esta manera, sabrás por dónde empezar a comunicarte para cumplir futuras normas de comportamiento.
- Aplicar las normas de comportamiento
Es importante que el/la adolescente sienta que hay un antes y un después cuando se aplican las normas de comportamiento. También hay que explicar las implicaciones de cumplirlas o no, y sacar provecho de los elementos que hemos aprendido en el punto anterior.
- No amenazar con castigos
Los castigos suelen alentar a los adolescentes que lo sufren a que crezca su hostilidad hacia la persona que ha impuesto el castigo. En el caso de que se utilicen, debe ser solo ante comportamientos muy dañinos.
- Mostrar satisfacción ante sus avances
Dar la enhorabuena cuando progrese, que se dé cuenta de que lo que hace tiene un impacto en tu actitud hacia él o ella. Eso hace aumentar su autoestima.
Una vez aplicados todos los pasos anteriores, hay que seguir de manera continuada, y evitar contradecirse, variar las normas de comportamiento o mostrar arbitrariedad a la hora de establecer reglas.